Cómo aprobar sin estudiar tanto y sin copiar

Aprobar estudios de ESO sin estudiar tanto es posible, y te voy a explicar cómo hacerlo sin copiar, sin chuletas y sin trampas. Dentro de poco llegan los exámenes del primer trimestre y seguro que muchos alumnos estáis ya estudiando. ¿Es necesario estar muchas horas delante de los libros? Depende mucho de tus capacidades y de cómo aprovechas el tiempo en el instituto.

Muchos profesores insisten en que los alumnos deben estudiar más tiempo para obtener buenos resultados académicos. Pero aquí lo que vamos a ver es algo completamente distinto, cómo ser más eficiente para no tener que dedicar tanto tiempo a estudiar. Mi experiencia está basada en la ESO (Educación Secundaria Obligatoria), una etapa en la que las materias tienen una dificultad media, en la que se tiene en cuenta el trabajo y gran parte de los problemas de los alumnos es por no estar atentos en clase.

Si estás estudiando los siguiente consejos te ayudarán a aprobar cada una de las materias sin tener que estudiar tanto. Sin embargo, debes ser consciente que si empiezas ahora a seguir estas indicaciones el cambio será paulatino. No esperes notar un cambio radical en un sólo mes, pero si te aplicas verás resultados muy buenos.

1. Céntrate en aprender y no en estudiar. 

Una de las cosas que suelo repetir bastante a mis alumnos en las clases es que lo importante no es estudiar, ni siquiera aprobar los exámenes, que su objetivo debe ser aprender. En otras palabras, lo que interesa es que las cosas que asimilas no las olvides después del examen. Si después de 1 año no lo recuerdas, es que lo has aprendido. Si te fijas hay una parte de lo que aprendes que está basado en cosas que has aprendido en años anteriores y eso si ya lo asimilaste bien en años anteriores te servirá

Una materia en la que se ve muy bien que lo importante es aprender es en matemáticas. En esta materia cada año aprenderás cosas nuevas, pero siempre se usan operaciones básicas como la división, la multiplicación o las restas, algo que si has aprendido a hacerlo bien en primaria ya no tienes que estudiarlo más, porque siempre aciertas con el resultado. Pues en las otras materias es similar.

2. Haz todos los debes y trabajos.

Para aprobar una asignatura no es sólo importante la nota del examen ya que hay otras aptitudes que se tienen en cuenta. En los estudios de ESO la realización de los deberes, la entrega de la libreta y de otros trabajos suele contar entre 1 y 3 puntos, sobre 10.

Pero lo importante no es sólo la puntuación de los deberes, sino que las actividades que te manda el profesor son para aprender. Por ello tienes que hacerlos tú y es importante que los hagas todos, sobre todo aquellos que sean más difíciles. Cuando superes estos ejercicios irás aprendiendo algunas de las cosas que te preguntarán en el examen. De esta forma si sabes hacerlos ya no tendrás que estudiarlos el día antes del examen.

3. Corrige los errores de los ejercicios.

Cuando en clase se corrige un ejercicio debes tomar nota de la respuesta correcta, señalando los puntos donde te has equivocado. Es importante hacerlo con un color diferente (normalmente el rojo o el verde), porque te servirá para saber que cosas haces bien y en que lugares te equivocas. Intenta no volver a caer en lo mismo. Si tienes poco tiempo para estudiar el dia antes del examen y has apuntado los errores podrás centrarte en entender aquellos problemas o ejercicios que no te salieron bien.

4. Se correcto con los profesores. 

Otro aspecto que también se tiene en cuenta en la nota y en el que no debes fallar es la actitud. No se trata de hacer la pelota a tus profesores, ni tampoco de ser pesado. El mejor regalo que puedes hacerle a un profesor es tratarle con respeto y naturalidad, empezando por escucharles cuando hablan. Si alguna vez te enfadas con algún profesor porque crees que no se ha portado bien contigo, no le respondas enseguida, deja pasar el tiempo y habla con él cuando estés más tranquilo.

5. Escucha con atención.

Escuchar al profesor cuando habla es una práctica de educación y además te vas a beneficiar de hacerlo. Muchas de las preguntas teóricas del examen se basan en explicaciones que el profesor ha dado en clase (a veces todo el examen). ¿Recuerdas que explicó cada día? Si fueras capas de sacar de tu memoria sus palabras podrías responder muchas de las cuestiones que te plantea sin necesidad de estudiar. Para acordarte es esencial que escuches con atención.

La idea es que luego los puedas recordar. Cuando tengas un rato porque estás recogiendo la mesa, bajando la basura o haciendo alguna cosa similar trata de recordar que has hecho durante el día en cada una de las materias. ¿Qué te han explicado en matemáticas? ¿Cuantos ejercicios habéis corregido en inglés? ¿De que era el mapa de ciencias sociales? Si tu memoria no es excelente, tendrás que estudiar bastante, pero a medida que la entrenes te quedarás con más frases y detalles.

6. Entérate de todo lo que te explican.

Escuchar no es suficiente. Tienes que entender los conceptos que te explican en clase y cuanto antes lo entiendas mejor. Por ello es importante que le preguntes al profesor cualquier cosa que no quede clara a la primera. Para ello sólo tienes que levantar la mano y tener un poco de paciencia. Cuando el profesor termine su explicación te atenderá. Si tienes vergüenza de preguntar porque crees que los demás alumnos se burlarán de ti, habla con tu tutor o con el profesor fuera de clase, pero no dejes pasar el tiempo. Recuerda que todo lo que saben los profesores cuando eran pequeños tampoco lo sabían y lo han aprendido a lo largo de muchos años. Animo, ara es tu oportunidad de saber muchas cosas.

7. Haz deporte.

Los científicos han demostrado que la actividad física intensa hace que tu cerebro y todo el sistema nervioso funcione mejor. Si sales a correr, haces natación, juegas a fútbol o a baloncesto el cerebro se activa. Además el deporte te hace sentir bien, mejora tu salud y ayuda a desarrollarte como persona. Todo esto va a hacer que para ti sea más sencillo aprender también las materias que no tienen que ver con el deporte.

8. Lee a diario.

Una habilidad muy importante para todos los estudios es leer y entender bien lo que se lee. Más de una vez los alumnos responden mal un examen por no entender las preguntas. Así que cuando más leas, tendrás más vocabulario y mejorarás tu comprensión lectora.

¿No te gusta leer? En la ESO es habitual que en las materias de lenguas (inglés, castellano, vasco, catalán, francés, valenciano, gallego...) se de un libro a los alumnos, además puedes leer cómics, novelas de fantasía o revistas deportivas. Y todo eso no hace falta que lo compres, casi seguro que cerca de tu casa hay una biblioteca en la que puedes leer la prensa del día, cómics y libros.

9. Jugar para aprender.

Algunos juegos nos ayudan a memorizar palabras, comprender conceptos y desarrollar habilidades. Y aprender jugando siempre es mucho más divertido, que hacerlo estudiando. Por ejemplo, hay algunos juegos de ordenador en los que aparecen mapas del mundo, como los que tienen que ver con la estrategia, así que puedes aprender el nombre de los países y capitales de cada nación.  Otros juegos están más encaminados a mejorar nuestras competencias básicas. Un ejemplo son los juegos de formar palabras, los que tienen una parte matemática o son de estrategia.


Estas son nueve tácticas para ayudarte a aprobar en el instituto sin estudiar y sin copiar, o al menos sin estudiar tanto. ¿Tienes algún truco que te ayude a sacar buenas notas sin tener que estar muchas horas delante del libro? Nos encantará escucharlo, deja tu comentario. Si te ha gustado el artículo, te invito a compartirlo en las redes sociales con tus amigos.

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